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Retinopatía del Prematuro
Síntomas
En las fases tempranas (estadios 1 al 2), intermedias (estadio 3) y tardías (estadio 4), los padres suelen no percatarse de la presencia de la ROP, dado que esta afección no manifiesta síntomas visibles ni evidentes. La ROP afecta la región interna del ojo, que no es observable a simple vista. Incluso cuando la enfermedad ya requiere tratamiento urgente por riesgo de pérdida de visión, los bebés continúan mostrando respuestas visuales básicas, como reaccionar a la luz y seguir objetos; sin embargo, no se observan manchas ni enrojecimiento en los ojos que indiquen claramente la presencia de la enfermedad.
La única forma de ver la enfermedad es a través de un estudio especializado de la retina usando aparatos especiales.
En las etapas avanzadas, cuando la retina ya está totalmente desprendida (estadio 5), es cuando los síntomas se vuelven evidentes. Estos incluyen:
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Leucocoria: es un reflejo blanquecino en la pupila, o centro del ojo, es similar al "reflejo rojo" en las fotografías, pero en lugar de rojo, la pupila aparece blanca.
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Estrabismo: La desalineación de los ojos, es un signo de ROP avanzada. OJO QUE NO VE, SE DESVÍA. Esto es importante también en niños o adultos con antecedente de prematurez.
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Dificultades visuales: Los bebés no responden a estímulos visuales, no siguen objetos o no reaccionan cuando se les acerca algo a la cara.
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Movimientos anormales de los ojos: Se le conoce como nistagmus y son movimientos laterales rápidos donde no fijan la mirada.
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Tallado frecuente o presionar el ojo hacia adentro: al presionar el ojo el bebé lo estimula y el estímulo hace que vea luces, a esto se le denomina reflejo óculo-digital. Este reflejo aparece en la etapa final de la enfermedad.
